miércoles, 13 de mayo de 2009

HOSPITAL SALVADOR




Hablar de hospitales es un tema un poco conflictivo, en especial en Chile y mas aún en Santiago, en donde ir a un hospital público suele ser una odisea. Primero por la burocracia y segundo por la poca tolerancia que suelen tener el personal de estos recintos, debido mayormente a los largos turnos y tediosos trámites que deben realizar, y todo esto por un sueldo que no supera el porcentaje necesario para vivir. Pero mas difícil es para los pacientes quienes deben soportar largas horas de espera de atención medica y meses para una consulta, llegando a esperar años por una operación; en definitiva estar enfermo y pobre en Chile es el peor castigo que podemos tener.
Pero no es el único inconveniente que debemos enfrentar a la hora de enfermarse, además debemos soportar ir a recintos tan poco aptos para atención medica que te deprimes de solo pensarlo.

Hoy me toco ir a un "Emblemático" (y cuando en Chile decimos "Emblemático" queremos decir "Viejo") centro de salud... el "Hospital Salvador". Una inmensa infraestructura que alberga un sin numero de memorias, que en su comienzo probablemente fue moderno y estructuralmente de bellas terminaciones, con formas y detalles inigualables.
Gran monstruo, con grandes pasillos que recorren innumerables salas, en donde facultativos, enfermeras, personal de aseo, administrativos y pacientes se reunen con un factor en común "SALUD".
Algunos tienen la dicha de encontrar rápidas soluciones, otros disfrutan de nuevas emociones, pero existe un porcentaje, no menor, que solo encuentra desesperanza , dolor y amargura con examenes que dan negativo o positivo según sea el caso. Volviendo así los sueños de vida en una horrible pesadilla.

Pero la verdadera odisea es recorrer completa esta gran mole, lo que puede llevarte horas, pero apreciar su delicada estructura tan solo unos segundos. Aun cuando su estructura esta abandonada y descuidada, se puede ver como el tiempo , en algunos rincones, ha transcurrido lento. Recorrer sus pasillos es una aventura, que si eres amante de la arquitectura, debes emprender. Grandes y viejos arboles que dejan ver el paso del tiempo en sus roídos troncos, abandonados rincones en donde colchones en desuso encontraron su albergue, trayendo así nostalgia por los tiempos en los que este gigante tubo su momento de gloria.
Si quieres y te atreves a conocer una parte del antiguo Santiago, que se contrasta con la modernidad de edificios en altura, entonces debes visitar este hermoso lugar llamado "HOSPITAL SALVADOR"

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